Mario Vargas Llosa estuvo en Arequipa y festejó su cumpleaños por primera vez en su ciudad natal. Ese 28 de marzo cumplió 76 años y ese mismo día su editora le entregó el primer ejemplar de su nuevo libro de ensayo "La civilización del espectáculo", que recién será presentado el próximo 11 de abril en Madrid. La alegría del Nobel no podía ser mayor, era un magnífico regalo, y él retribuyó esa gran alegría con un gesto mayor: donó su biblioteca completa a la ciudad de Arequipa, y quizá ese sea uno de los mejores regalos que la ciudad ha recibido desde su fundación en 1540.
Hay dos hechos que en los últimos tiempos han hecho que Vargas Llosa visite con más frecuencia a nuestra ciudad. El primero es la creación de la Biblioteca Regional que lleva su nombre desde hace un año; y el segundo, es el Premio Internacional de Novela Corta que también ha sido creado en su honor, y que ya tiene como primer ganador al escritor Pedro Novoa con su obra "Maestra vida".
Estos dos eventos importantes se suman al compromiso de convertir la casa del escritor en un museo, que en palabras del propio Nobel, en una crónica publicada en un diario español, será un lugar para hacer vívida la literatura: "...mi madre se hubiera alegrado mucho de saber que esta casa que le traía tan malos recuerdos será, a partir de ahora, una institución cultural, donde los arequipeños vendrán a leer y a sumergirse en las fantasías literarias y a soñar con ellas y a vivirlas, como ella me enseñó a hacer para buscar la felicidad cuando todavía yo babeaba y mojaba las sábanas a la hora de dormir.".
Los más de treinta mil libros del Nobel, distribuidos entre Lima, Madrid y París, emprenderán un largo recorrido hasta Arequipa, su tierra natal. Será como un viaje a la semilla, que permitirá que la cultura florezca en la ciudad.